El Post

Lo esencial: Autoridades judiciales propusieron cambios constitucionales, presupuesto mínimo del 5% del Tesoro General, modernización tecnológica con inteligencia artificial y una carrera judicial basada en meritocracia para reformar el sistema de justicia.

Estas decisiones surgieron en la cumbre histórica en Sucre que reunió a 500 personas, los cuatro órganos del Estado y autoridades nacionales, excepto los magistrados autoprorrogados del TCP.

Por qué importa: El encuentro marca un punto de inflexión tras dos décadas de subordinación política bajo el gobierno hegemónico del MAS, con un sistema judicial que recibe apenas 0,35% del presupuesto nacional y donde el 58,76% de presos está en detención preventiva.

El problema de fondo: Los presidentes del TSJ, Consejo de la Magistratura y Tribunal Agroambiental coincidieron en que sin recursos suficientes es imposible hablar de independencia judicial. Rómer Saucedo denunció que el Órgano Judicial fue históricamente un “apéndice del Ejecutivo”.

Conclusiones de las mesas de trabajo: Cuatro mesas definieron propuestas concretas para la reforma judicial.

Reforma normativa: Reforma estructural de la Constitución y Ley del Órgano Judicial, creación de procedimiento agroambiental, revisión de Ley 73 sobre deslinde jurisdiccional, ajustes en normas laborales, reforma integral del sistema penal hacia código único y actualización del Código Civil.

Presupuesto: Asignar al Órgano Judicial mínimo 5% del Tesoro General aprobado por ley, recursos adicionales para justicia indígena e incorporar normas ISO para certificar la administración de justicia.

Modernización tecnológica: Crear unidad nacional de justicia digital, unificar sistemas informáticos, interoperar datos con otras instituciones, usar documentos virtuales, incluir a la justicia indígena en modernización, financiar infraestructura tecnológica e implementar inteligencia artificial.

Carrera judicial: Proponer ley de carrera judicial vertical basada en meritocracia con ingreso por dos vías: ordinaria mediante Escuela de Jueces y extraordinaria por convocatorias del Consejo de la Magistratura.

Qué dicen: Las autoridades expresaron urgencia por la reforma.

“Sin justicia, no tenemos destino”, aseguró el presidente Rodrigo Paz comprometiendo respaldo total.

“Cuando uno hace fuerza solito le sale hernia”, dijo Saucedo sobre trabajar coordinadamente.

Richard Méndez, presidente del Tribunal Agroambiental, insistió en aprobar leyes ambientales postergadas hace 15 años para enfrentar la crisis climática.

Otto Ritter, abogado constitucionalista, exigió que se incluya un punto aprobado por unanimidad: la exigencia de la renuncia de los magistrados autoprorrogados.

Los ausentes: La disputa institucional marcó el inicio con la ausencia de los magistrados autoprorrogados del TCP que alegaron necesidad de preservar imparcialidad.

El vicepresidente Edmand Lara tampoco asistió alegando falta de invitación formal.

Saucedo afirmó que los magistrados autoprorrogados “no estaban invitados”, sin embargo criticó su justificativo para no asistir al acto.

Entre líneas: El desafío recuerda los fracasos de procesos anteriores como la cumbre de 2016 cuyas conclusiones nunca se aplicaron.

El presidente del Senado, Diego Ávila, advirtió que el reto va más allá de las leyes: implica construir una nueva cultura de independencia judicial.

Qué sigue: El país observa con cautela y expectativa si este esfuerzo podrá devolverle credibilidad a un sistema que ha perdido la confianza de la ciudadanía, en un contexto post hegemónico del MAS.