Lo esencial: Rodrigo Paz recibirá una economía en recesión técnica con un PIB que cayó -2,40% al primer semestre, inflación acumulada a septiembre de 18,33% y reservas internacionales netas de apenas 3.275 millones de dólares.

Por qué importa: Bolivia enfrenta la peor crisis económica en décadas con proyecciones que la sitúan como la economía de menor crecimiento en Sudamérica.

El nuevo gobierno deberá gestionar un déficit fiscal proyectado cercano al 10% del PIB mientras lidia con la escasez de dólares y una inflación que duplicó las metas oficiales.

El FMI proyecta un crecimiento de apenas 0,6% para 2025, mientras el Banco Mundial prevé -0,5%.

La inflación podría alcanzar 20,8% según el FMI, lo cual situaría a Bolivia como la cuarta economía más inflacionaria de Latinoamérica

Los números críticos: Los indicadores macroeconómicos revelan desequilibrios severos en todos los frentes de la economía boliviana.

PIB: 50 mil millones de dólares.

Contracción de -2,40% acumulada al primer semestre 2025 (recesión técnica confirmada).

Inflación: 18,33% acumulada enero-septiembre 2025 vs objetivo gubernamental de 7,5%.

Déficit fiscal: 9,9% del PIB proyectado para 2025.

Deuda externa pública: 13.806 millones de dólares a junio de 2025 (25% del PIB).

Reservas en divisas/dólares: Solo 162,2 millones de dólares a abril de 2025.

Precio del dólar oficial: Bs 6,86; el paralelo a Bs 12,10 (llegó hasta Bs 20 en abril).

Panorama general: La disparidad entre las proyecciones del gobierno saliente y las de los organismos internacionales genera incertidumbre extrema.

El Presupuesto General del Estado proyectó un crecimiento del 3,51% para 2025.

El FMI estima apenas 1,1%, el Banco Mundial 1,2% y la CEPAL advierte que la economía boliviana será la de menor crecimiento sudamericano.

El problema de fondo:

El país pasó de ser acreedor a deudor frente al resto del mundo, con un servicio de deuda externa de 922,7 millones de dólares a julio 2025 que supera en 128% las exportaciones mensuales de 719,7 millones de dólares.

Las agencias Fitch Ratings, Moody’s y Standard & Poor’s rebajaron la calificación de riesgo de Bolivia al grado de no inversión, mientras el indicador EMBI llegó a 20,4 puntos el 15 de mayo de 2025.

Qué dicen los analistas: Los economistas coinciden en diagnosticar una situación de estanflación con necesidad urgente de medidas estructurales.

Luis Fernando Romero Torrejón: “Bolivia requiere con urgencia medidas estructurales para estabilizar su economía y mitigar los impactos sociales negativos”.

Carlos Aranda (Centro POPULI): “No es problema de comerciantes, sino de políticas económicas” sobre la inflación causada por la emisión monetaria.

Raúl Peñaranda: “Bolivia es un país donde el 80% de la economía es informal. Paz ha logrado entrar con su discurso de ‘capitalismo para todos'”.

Gonzalo Chávez propone “reducir el gasto público, flexibilizar el tipo de cambio y conseguir dólares”.

Romero Torrejón: El nuevo gobierno está “casi obligado a endeudarse más” por la falta de liquidez.

Entre líneas: El discurso de Paz sobre “capitalismo para todos” y su declaración como “capitalista de los pequeños emprendedores” sugiere que se enfocará en medidas de liberalización y apoyo al vasto sector informal (80% de la economía), en lugar de un ajuste fiscal ortodoxo tradicional.

Qué sigue: Rodrigo Paz asumirá la presidencia el 8 de noviembre y enfrentará el desafío de reanimar la economía sin acceso inmediato a asistencia del FMI.