Las encuestadoras en la mira por resultados inesperados

Lo esencial: La victoria de Rodrigo Paz en el balotaje frente a Tuto Quiroga invirtió dramáticamente las proyecciones de las encuestadoras (que daban como favorito a Quiroga), lo que refleja un vuelco de más de 17 puntos porcentuales.

Por qué importa:

• Esta disyuntiva se suma a una tendencia recurrente en el país que cuestiona la credibilidad y función de las encuestas preelectorales.

• El Tribunal Supremo Electoral llegó a debatir la posibilidad de prohibir las encuestas porque “crean un clima de inseguridad, de poca confianza en el proceso”.

Los números: Las principales encuestadoras fallaron dramáticamente en sus proyecciones:

• Ipsos/Ciesmori primera vuelta: Proyectaba a Paz con 3% a 9%, pero obtuvo 32,15% (desviación de +23 puntos).

• Ipsos/Ciesmori segunda vuelta: Daba ventaja a Quiroga 47% vs 39% Paz, pero Paz ganó 54,96% vs 45,04% (inversión de más de 17 puntos).

• Captura Consulting primera vuelta: Daba por ganador en la primera vuelta a Doria Medina (21%), seguido de Quiroga (20%). Paz figuraba quinto con 6,4%.

• Captura Consulting segunda vuelta: Quiroga se anotaba 42,9% sobre 38,7%.

Las causas del fallo: El periodista y abogado Andrés Gómez Vela identificó múltiples factores que explican el desajuste entre encuestas y resultados:

• Voto emocional vs racional: “Las encuestas miden lo que la gente dice, pero las urnas revelan lo que la gente siente”.

• Muestreo deficiente: Concentración en áreas urbanas, subestimando zonas rurales donde existe un voto silencioso.

• Voto oculto: Electores ocultaron su voto por temor a ser juzgados o estigmatizados.

• Volatilidad no captada: Fuerte cambio en los últimos días entre votantes indecisos.

• Factor emocional: “En tiempos electorales el comportamiento humano se rige por el sistema límbico, donde mandan las emociones, y esto las encuestas aún no saben medirlo”.

Qué dicen: Los analistas difieren sobre si fue error técnico o manipulación intencional.

• Jorge Soruco (Visión 360): “El error no reside en el fallo completo de las encuestas, sino en el mal uso de los resultados por parte de quienes los hicieron públicos”.

• Marco Antonio Santiváñez Soria (Ahora el Pueblo): “No son simples errores técnicos, sino encuestas amañadas, tendenciosas y diseñadas para fabricar escenarios”.

• Gustavo Ávila (vocal TSE): Tras la primera vuelta, planteó para la segunda prohibir las encuestas, pero el TSE las mantuvo.

Entre líneas: Santiváñez sostiene que la explicación es política, no técnica, y que estas empresas persisten en aplicar modelos inadecuados para un país plurinacional, diverso y fragmentado como Bolivia. 

• La intención sería utilizar la encuesta como instrumento para moldear la opinión pública y crear un “efecto arrastre” o desmovilizar al electorado.