Bolivia en la encrucijada económica: Gradualismo vs. terapia de choque
Lo esencial: A días del balotaje, el país enfrenta una elección entre dos filosofías económicas opuestas para salir de la crisis: el ajuste gradual del PDC liderado por Gabriel Espinoza versus la terapia de choque liberal de Libre, encabezada por Ramiro Cavero.
- Ambos equipos diagnostican una “catástrofe” económica heredada del MAS, pero difieren en las soluciones.
Por qué importa: La decisión definirá el rumbo económico para la próxima década en medio de una crisis sin precedentes: escasez crítica de dólares y combustibles, inflación del 24,2% (36,7% en alimentos), 85% de informalidad económica y más del 50% de la población rozando la línea de pobreza.
- El modelo de los últimos 20 años “no va más”, según el consenso político y económico.
Un diagnóstico compartido: Los equipos de Paz y Quiroga coinciden en la gravedad de la crisis.
- Crisis de liquidez: Escasez paralizante de dólares y combustibles, flota de transporte operando al 70% de su capacidad.
- Salud fiscal: Alto endeudamiento, tipo de cambio oficial “irreal” con seis cotizaciones diferentes.
- Economía productiva: Aparato productivo “prácticamente paralizado” con 85% de informalidad.
- Impacto social: Inflación interanual del 24,2% general y 36,7% en alimentos.
La batalla por los dólares: La obtención de divisas marca la primera gran divergencia ideológica entre ambos planes.
Plan Libre (Cavero):
- Gestionar créditos de emergencia con el FMI, BID, CAF y FLAR por $us 3.000 a 4.000 millones en los primeros tres meses.
- Devolver $us 2.000 millones retenidos del Banco Central a la banca.
- Tipo de cambio “real, único y flexible” definido por el gobierno (flotación sucia).
Plan PDC (Espinoza):
- Rechaza créditos externos inmediatos, prioriza “ordenar la casa” primero.
- Necesita flujo de $us 250 millones mensuales principalmente para combustibles.
- Propone mercado cambiario libre donde bancos compren y vendan a precios de mercado, convergencia natural en 3 a 4 meses.
El futuro del Estado: Las propuestas sobre empresas públicas reflejan dos visiones de país distintas.
- PDC – Reforma gerencial: “Capitalismo para todos”. Pausa administrativa inmediata para empresas deficitarias, auditorías, decisión caso por caso (transferencia a trabajadores, alianzas público privadas, venta o cierre). YPFB no sería privatizada pero competiría “de igual a igual” con privados.
- Libre – Capitalismo popular: Entrega de acciones de empresas rentables (YPFB, Entel, Litio, Comibol) a todos los bolivianos mayores de 18 años. Ciudadanos como fiscalizadores y beneficiarios de dividendos. Estado mantendría “acción dorada” con derecho a veto
El dilema energético: Ambos reconocen la inevitabilidad del ajuste de subsidios ante proyecciones alarmantes: Bolivia podría importar GLP a Bs 160 por garrafa en 2026 (versus Bs. 22,5 actuales) y ser importador neto de gas en 2028.
- PDC – Ajuste gradual: Mantener precios el “día uno”, levantamiento “lo más acelerado posible” tras compensaciones a vulnerables. Precio único sin subvención para diésel, diferenciado para gasolina protegiendo transporte público.
- Libre – Liberalización de mercado: Usar créditos para asegurar el suministro los primeros 3 a 4 meses. Transferir importación al sector privado. Subsidio focalizado solo para transporte público con chips para evitar reventa.
Qué dicen los expertos: El debate organizado por la Fundación Jubileo reveló consensos y advertencias críticas.
- Gonzalo Chávez (moderador): Coincidencia en acabar con el déficit fiscal, flexibilizar el tipo de cambio y eliminar subsidios. Cuestiona la falta de un plan de contingencia para divisas inmediatas. “La salida a la crisis económica es política, no es solo técnica”.
- Erika Brockmann (politóloga): Señala optimismo excesivo respecto a la solución de crisis de divisas y energética. Tiene una visión crítica sobre la evaluación del impacto social y la sostenibilidad de las propuestas.
- Raúl Velásquez (experto en energía): Advierte sobre implicaciones críticas en el sector hidrocarburos. Proyecta caída de producción del 62% en líquidos y 54% en gas.
El costo social y gobernabilidad: Ningún plan será viable sin aprobación política en la Asamblea Legislativa.
- PDC: Prioriza frenar la inflación antes de aumentos salariales.
- Libre: Incluye programas de empleo y red de protección social focalizada. Insiste en “decir la verdad a la gente” sobre la dureza de las medidas.
- Desafío político: El próximo gobierno enfrentará medidas impopulares sin mayoría en la Asamblea Legislativa.
La conclusión: El 19 de octubre los bolivianos elegirán entre la estabilización paulatina de Paz-Espinoza que busca ordenar internamente antes de ajustes duros, o la terapia de choque de Quiroga-Cavero que apuesta por restaurar confianza del mercado con medidas liberales y financiamiento externo inmediato.
