El Post

Lo esencial: El presidente Rodrigo Paz ordenó a la Policía y Fuerzas Armadas recuperar el control de “territorios dentro de la patria donde no tenemos soberanía”.

No dio nombres, pero los reportes de prensa identifican al menos siete regiones críticas donde el Estado no ejerce autoridad plena.

Por qué importa: La declaración evidencia que el narcotráfico, el contrabando, el crimen organizado y el avasallamiento de tierras han rebasado el control del Estado en múltiples regiones del país.

Las siete “tierras de nadie” identificadas:

Chapare/Trópico de Cochabamba: Bastión de Evo Morales, es controlado por grupos armados civiles que impiden el ingreso policial. Frecuentemente, la Policía ha tenido que salir del lugar ante la amenaza de seguidores de Morales.

“México Chico” (Norte de Potosí): Zona roja con plantaciones de marihuana y laboratorios de cocaína confirmados por el anterior Gobierno. Grupos armados han causado la muerte de policías.

Poblaciones fronterizas con Brasil: Puerto Suárez, Bolpebra y Guayaramerín bajo amenaza del Comando Vermelho. La Policía activó hace dos semanas la operación “Escudo de Hierro” en Santa Cruz, Beni y Pando.

Zonas de contrabando en Oruro y Potosí: Mafias controlan el ingreso y salida de mercancías, especialmente combustible (diésel y gasolina) desviado por pasos ilegales.

Challapata: Mencionada como zona con soberanía limitada por control de grupos locales y actividad criminal.

Yapacaní (Santa Cruz): Municipio estratégico en el límite de Santa Cruz con el trópico de Cochabamba, donde grupos cocaleros controlan el ingreso. Reportes de emboscadas, tomas de cuarteles y laboratorios de cocaína en el Parque Amboró.

Guarayos (Norte de Santa Cruz): Región de conflicto permanente por tierras entre comunidades indígenas, menonitas y avasalladores. Enfrentamientos armados, incendios intencionales y tráfico de tierras y madera.

Qué dice Paz:: “Aquí no hay dueños del territorio, no hay dueños de regiones”, dijo en su primer discurso como Capitán General de las Fuerzas Armadas, pronunciado en Sucre.

Planes de recuperación: El gobierno anterior trató de implementar operativos conjuntos entre la Policía y la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) para restablecer el control estatal.

Intervención anunciada en “México Chico” para establecer presencia permanente.

Operación “Escudo de Hierro” reforzando todo el cordón fronterizo con Brasil.

Despliegue de dispositivos fijos y móviles en puntos fronterizos y pasos irregulares.

Entre líneas: La admisión presidencial de “territorios sin soberanía” representa un reconocimiento inédito del nivel de penetración del crimen organizado en Bolivia, señalando que el Estado ha perdido el monopolio del control territorial en regiones estratégicas para el narcotráfico y el contrabando.

Qué sigue: Las Fuerzas Armadas y la Policía deberán ejecutar operativos coordinados para recuperar estas siete regiones, enfrentando la resistencia de grupos armados civiles, narcotraficantes y organizaciones criminales transnacionales que han establecido control territorial paralelo al Estado.